Para las mujeres una de las principales preocupaciones estéticas suelen ser la grasa localizada, la flacidez o las manchas que dan un aspecto irregular a nuestra piel. Para combatirlas además de la aplicación diaria de cremas se requieren otros sistemas más avanzados. El objetivo principal de estos tratamientos es llegar a las capas más profundas de la piel, con la finalidad de modificar las estructuras implicadas.
Ahora que empezamos un nuevo año, y que cada vez está más cerca el verano, nos podemos plantear seguir alguno de los tratamientos que te detallamos a continuación, para así lucir un un cuerpo firme y terso en la playa.
Para decirle adiós a la acumulación de grasa en vientre y “cartucheras”:
- La mesoterapia: Este clásico tratamiento es el complemento ideal dentro de un plan de adelgazamiento para reducir centímetros. Consiste en infiltrar a través del tejido graso, sustancias lipolíticas que desintegran la grasa y activan el drenaje.
- La ultracavitación: Se basa en los ultrasonidos de baja frecuencia, que rompen las células grasas, pero respetando los tejidos adyacentes.
La flacidez se suele agravar a partir de los 40 años, sobre todo en brazos y muslos. Las tecnologías más efectivas para tonificar esta zona del cuerpo son:
- La radiofrecuencia: Consiste en un calentamiento sostenido del tejido (55-62ºC), para generar una respuesta del colágeno, al mismo tiempo que mantiene la superficie de la piel a su temperatura normal.
- La electrotrerapia o gimnasia pasiva con electrodos consigue el efecto del ejercicio continuado para conseguir una tonificación muscular, pero sin esfuerzo.
Para lucir una piel tersa y sin manchas, puedes optar por:
- El láser: En sus diferentes longitudes de onda, es el aparato ideal para eliminar los defectos de pigmentación.
- Los tratamientos despigmentantes a base de ácido salicílico, retinoico, o los fotopeelings dan grandes resultados en la tarea de otorgar un aspecto homogéneo a la piel.
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