Lo importante de mantener el cutis hidratado

El cutis lavado, limpio y tonificado está preparado para recibir las propiedades de una crema hidratante, la cual va a aportarle una película de agua y a protegerla de agresiones externas. Así como el agua es imprescindible para todo tipo de organismos, las cremas hidratantes lo son para todo tipo de pieles. 

Una vez que la piel está completamente limpia, estos productos se aplican con ayuda de las yemas de los dedos mediante movimientos circulares y suaves por el rostro, el cuello y el escote. Entre sus ingredientes básicos se encuentran la cera de abeja y el bicarbonato de sodio, los cuales ayudan a emulsionar el agua y los aceites, y dan la textura apropiada a las cremas. La sensación de bienestar que experimenta la piel al aplicarle una hidratante es inmediata.

No es necesario aplicar una gran cantidad: lo importante es que quede muy bien extendida.

Recetas naturales

Crema hidratante humectante

Ingredientes

Aloe

Aceite de oliva virgen

Agua destilada

Preparación y aplicación

• Mezclar en un recipiente una cucharadita de zumo de aloe, tres gotas de aceite de oliva virgen y cinco gotas de agua destilada. La crema hidratante ya está lista para su aplicación.


• La crema que se consigue uniendo estos componentes tiene propiedades hidratantes propias del aceite de oliva y el agua pira, así como las múltiples que proporciona el aloe, entre las que cabe citar las bactericidas, antisépticas, humectantes y regeneradoras. Es una crema excelente para el cutis seco o muy castigado por la intemperie.

Crema hidratante antiarrugas y reafirmante

Ingredientes

Aceite de semillas de uva

Romero

Aceite esencial de incienso

Agua destilada

Bicarbonato de sodio

Cera de abeja

Preparación y aplicación

• Preparar una infusión con una cucharada de romero en un vaso de agua destilada. Mientras reposa, derretir una cucharada de cera de abeja en medio vaso de aceite de semillas de uva. Colar la infusión, añadirle una cucharadita de bicarbonato de sodio y seis gotas de aceite esencial de incienso; remover muy bien. Cuando la mezcla sea homogénea, verter lentamente la infusión en el aceite, batiéndolo para que los elementos se integren y la pasta adquiera una consistencia cremosa. Guardarla en un frasco previamente esterilizado.


• Las cremas antiarrugas y reafirmantes se recomiendan para personas que tengan más de 30 años de edad. En esta receta se han unido las cualidades rejuvenecedoras del aceite esencial de incienso y las reafirmantes del romero. Como base oleosa se ha escogido el aceite de semillas de uva porque aporta elasticidad y no es excesivamente graso; por eso, esta crema es apta para todo tipo de cutis.