La actividad física tiene un poderoso efecto en la belleza y la salud integral, al practicar algún ejercicio de manera regular favorecemos las actividades propias del organismo, se logran mejores estados anímicos y nos sentimos cómodos con nuestro cuerpo.
- En lo físico:
Mejora la postura, previene los dolores de espalda y malformaciones en la columna. Mantiene las articulaciones en buen estado, fortalece tendones y ligamentos.
Beneficia el sistema óseo y muscular.
Da firmeza y tonicidad a los músculos, moldea la silueta.
Favorece la digestión y la circulación.
Desarrolla la fuerza muscular.
Refuerza el sistema nervioso central para recibir una percepción, transformarla en una orden motora y enviarla a los músculos.
Previene enfermedades.
- En lo psicológico:
Disminuye los estados de tristeza, depresión y negativismo.
Mejora el sueño y aleja el insomnio.
Promueve una sensación de libertad.
Incrementa el sentido de perseverancia.
Existen opciones para disfrutar de la actividad física y sus efectos, es indispensable evaluar lo que representa mayor placer y entretenimiento, el ejercicio no debe ser sinónimo de obligación.
El secreto del éxito en la actividad física es encontrar un tipo de ejercicio adecuado para cada cual, algunos prefieren ejercitarse en solitario, otros se sienten mejor en grupos; hay quienes disfrutan de actividades intensas o trabajan con ejercicios estiramiento y fuerza, desde montar en bicicletas, caminatas vigorosas, practicar deportes más exigentes como el tenis ,la tarea consiste en encontrar aquello que brinde satisfacción.
Cuatro deportes estrellas
Son deportes accesibles, no requieren un gran conocimiento o entrenamiento y contribuyen a relajar la mente.
- Caminatas
Beneficia el aparato motriz, circulatorio, respiratorio, ayuda a las articulaciones, contribuye a la eliminación de grasa, distrae nuestra mente y brinda una sensación positiva, la practican personas de todas las edades, pero hay un secreto y es la forma como debe realizarse para que este ejercicio sea provechoso, se debe contar con calzado apropiado, ropa holgada y un lugar o ruta poco exigente y agradable.
La caminata debe hacerse en tres ritmos: al principio con un paso normal, seguido por uno más vigoroso y terminando con uno más lento, las zancadas deben ser más bien grandes, las rodillas van hacia delante y se posan primero los talones y después la punta de los dedos.
- Correr y trotar
Debe contarse con ropa adecuada que permita la transpiración y un buen calzado deportivo que amortigüe el pie y brinde estabilidad, algunos corredores con experiencia utilizan cronómetros para fijarse metas y llevar un control sobre el ejercicio.
La respiración es importante, debe ser lenta y profunda para aprovechar mejor oxígeno que llega a los pulmones .El oxígeno es clave para que los músculos tengan mayor resistencia y no se fatiguen, se debe estar atento y consciente de los movimientos, vigilando en cada zancada que los pies se posen desde el talón hasta la punta de los dedos, así, se evitan algunos problemas que pueden sufrir las articulaciones, los expertos recomiendan este deporte durante 30 minutos tres veces por semana.
Entre sus grandes beneficios están el fortalecimiento de piernas y nalgas, aumento del metabolismo de las grasas, el apoyo al corazón, al sistema circulatorio e inmunológico y la relajación de la mente.
- Montar en bicicleta
Es una actividad beneficiosa, utiliza diversos grupos musculares al mismo tiempo, protege las articulaciones, es conveniente para aquellos que sufren de sobrepeso, fortalece la condición física general.
El equipo básico consiste en una bicicleta, un casco, un chaleco con señales o parches fosforescentes (reflejan la luz), herramientas básicas, un candado y una cadena.
Las bicicletas estáticas son otra opción muy relajante, a la vez que se pedalea se puede escuchar música, ver televisión y reflexionar, también se puede variar el ritmo para ajustar la intensidad del ejercicio a las condiciones de cada cual, conviene empezar siempre con una resistencia ligera y revisar la altura de la silla.
- Natación
Es una opción agradable para mejorar el estado físico general, requiere una piscina, lo que para algunos puede ser un problema, sin embargo, es una actividad benéfica por sus efectos sobre el organismo como por el estado de relajación que promueve.
Una de sus grandes ventajas es que el agua sostiene el cuerpo y lo ayuda a trabajar y tonificar de manera integral los músculos, beneficia la columna vertebral, los tendones y articulaciones, aumenta la flexibilidad, resistencia y fuerza muscular.
La natación practicada en el mar es especialmente positiva, es un medio eficaz para la eliminación de microorganismos y toxinas.
Un efecto secundario de nadar es que el cuerpo en contacto con el agua fría intenta mantener la temperatura y regula la circulación de la piel.
Aquéllos que no están en forma pueden empezar con un estilo sencillo como el libre para más adelante pasar a unos más exigentes, vale la pena tener en cuenta que se calcula que 50 metros de natación por minuto elimina unas 360 calorías, es decir, el doble de lo que se logra con un ejercicio aeróbico, es un deporte recomendado durante el embarazo.
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