Cremas hidratantes para tus pies elaboradas en casa

Crema hidratante para pies con asperezas

Ingredientes

Aceite de coco

Aceite de barraja

Calabaza o auyama

Cera de abeja

Bicarbonato de sodio

Leche

Preparación y aplicación

• Cocer 50 gramos de calabaza, triturarla y mezclarla con medio vaso de leche. Mezclar un cuarto de vaso de aceite de coco y otro tanto de aceite de borraja; calentarlos y derretir en él una cucharada y media de cera de abejas. Añadir una cucharadita de bicarbonato de sodio en el vaso de leche y calabaza o auyama, mezclar y verter el líquido en el cazo de aceite y cera. Remover bien.


• Los ingredientes profundamente emolientes de esta receta producen  una crema que trata las durezas de los pies de forma intensiva. Se recomienda aplicarla varias veces al día, sobre todo antes de ir a dormir, después de haber lavado bien la zona, preferiblemente con un jabón exfoliante.

Crema hidratante y refrescante para pies

Ingredientes

Flores de lavanda

Aceite esencial de menta piperita

Aceite de romero

Cera de abeja

Bicarbonato de sodio

Preparación y aplicación

• Hacer una decocción con una cucharada de flores de lavanda machacadas en un vaso de agua durante diez minutos; pasado este tiempo, añadirle una cucharadita de bicarbonato de sodio. Derretir en un cazo una cucharada y media de cera de abeja en medio vaso de aceite de romero y verterlo sobre la decocción. Añadir de tres a seis gotas de aceite esencial de menta piperita y remover bien.


• Tanto la menta piperita como las flores de lavanda tienen un efecto revitalizador sobre los pies que, con la ayuda de las propiedades tónicas del romero, hacen de esta crema una aliada después de una larga caminata o de estar todo el día de pie.

Nutrición

La piel que recubre los pies tiene un profundo desgaste. Los zapatos e incluso la forma de caminar la roza continuamente, de ahí que sea conveniente tenerla lo más sana posible a fin de evitar durezas y molestias que, con el tiempo, son difíciles de erradicar.

Mascarilla suavizante de calabaza o auyama para pies

Ingredientes

Calabaza o auyama

Vaselina refinada

Preparación y aplicación

• Hervir 50 gramos de calabaza o auyama, triturarlos y añadirles 20 gramos de vaselina refinada.


• Las propiedades de la vaselina se multiplican al añadir los nutrientes de la pulpa de calabaza. Esta mascarilla se aplica en la planta del pie y se deja actuar durante media hora.

Crema nutritiva de manteca para pies

Ingredientes

Manteca de karité

Manteca de cacao

Aceite esencial de pimienta

Preparación y aplicación

• Derretir cinco cucharadas de manteca de karité y tres de manteca de cacao. Dejar enfriar y guardarla en la nevera durante 15 minutos. Pasado este tiempo, añadirle cinco gotas de aceite esencial de pimienta y batir hasta que se forme una crema opaca y homogénea.


• Las mantecas de esta receta nutren la piel en profundidad y la suavizan. El aceite esencial de pimienta, además de aportar un aroma a la mezcla, es estimulante y tónico. Aunque es óptima para todo tipo de pies, se recomienda para pies cansados y ásperos.

Cuidados específicos de los pies

Debido al roce constante de los zapatos, la piel de los pies tiende a producir durezas y callos, que son zonas de la piel donde como respuesta al roce, se produce una acumulación de queratina. En realidad se trata de un mecanismo de defensa del organismo, ya que el callo o la dureza se produce para proteger la piel que hay debajo, pero son muy antiestéticos, sobre todo en las épocas en las que se utiliza el calzado abierto cuando hace más calor.

Hay muchas soluciones naturales para esta molestia, pero debe tenerse presente que si no se soluciona el problema que la produce, aunque la dureza o callo sea eliminado, volverá a aparecer. Además, retrasar el tratamiento puede empeorar el aspecto, grosor y sequedad de una dureza, haciendo que cada vez resulte difícil terminar con ella. Por eso hay que ponerse cuanto antes manos a la obra.

Callicida de ajo y aceite

Ingredientes

Un diente de ajo

Aceite de oliva

Gasa

Esparadrapo

Preparación y aplicación

• Machacar en un mortero un diente de ajo con una cucharada de aceite de oliva hasta hacer una pasta. Aplicarla sobre la dureza o callo y cubrirlo con un trozo de gasa sujeta con esparadrapo.


• El ajo es una sustancia que penetra en el callo ablandando la queratina que lo forma. Es eficaz para ablandar callos y también verrugas si se usa en forma de cataplasma dejándolo actuar toda la noche. El aceite de oliva suaviza la piel y hace que las capas superiores que forman la dureza se desprendan más fácilmente dejando a la luz la piel que hay debajo.